Una réplica a tamaño real del Titanic, el transatlántico que naufragó en su viaje inaugural entre Inglaterra y Estados Unidos en 1912 causando la muerte de más de 1.500 personas, ha comenzado a construirse en la provincia central china de Sichuan, donde sus promotores esperan que se convierta en un atractivo turístico, informó hoy la prensa local.
El barco, con los mismos 270 metros de eslora (longitud) y 28 de manga (anchura) que el original, se botará en un embalse de la localidad de Daying, donde permanecerá atracado permanentemente, y formará parte del resort turístico de lujo "Seven Star International", destacó la agencia oficial Xinhua.
La constructora del buque, Wuchang Shipbuilding Industry Corporation, ha prometido que el barco será fiel al diseño del Titanic original y contará como éste con sala de fiestas, teatro, piscina y habitaciones de primera clase en las que se intentará recrear el estilo de vida de los pasajeros de hace más de un siglo.
«Tras su hundimiento, nadie vio los planos completos del "Titanic", algunos de los cuales acabaron en manos de coleccionistas mientras otros siguen perdidos. Nos hemos pasado años recuperando los planos en muchas partes del mundo y hemos conseguido reunir la mayoría de ellos», explicó al periódico oficial “China Daily” el consejero delegado de Qixing, Su Shaojun.
Cuando las obras del nuevo barco finalicen, algo que se prevé a mediados de 2019, los promotores de la obra celebrarán en su interior fiestas de época y banquetes en los que el menú sea muy similar al servido en el Titanic en 1912, aunque como concesión a la modernidad el buque contará con conexión wifi.
La obra, que ha contado con el asesoramiento de diseñadores británicos y estadounidenses, costará unos 1.000 millones de yuanes (145 millones de dólares, 136 millones de euros).
El diario South China Morning Post adelantó además que los turistas que visiten el nuevo barco podrán participar en simulaciones que a través de nuevas tecnologías les permitan "experimentar algo del horror" que vivieron los viajeros en aquella aciaga noche del 14 de abril de 1912 en la que el Titanic se hundió tras chocar con un iceberg en el Atlántico norte.
Una noche en las habitaciones más económicas del nuevo barco costará alrededor de 3.000 yuanes (unos 430 dólares, o 410 euros), mientras que para pernoctar en los camarotes más lujosos habrá que pagar cientos de miles de yuanes (decenas de miles de dólares o euros), anunció el diario hongkonés.
La historia del Titanic es muy popular en China, especialmente a raíz del éxito que la película homónima de James Cameron tuvo entre los espectadores chinos, sobre todo por su versión remasterizada en 3D, estrenada en 2012 -por el centenario del naufragio- y que logró una mayor taquilla en el gigante asiático que en el mismo EEUU.
Esa popularidad animó a la construcción de la réplica, aunque el proyecto, que en principio iba a comenzar en 2013, se ha retrasado unos años, por razones no reveladas.
Con la ayuda financiera de las autoridades locales de Daying, que se ubica a 130 kilómetros de Chengdu, la capital de Sichuan, este proyecto pretende fomentar el turismo en la zona. Además del «Titanic», que estará terminado a finales de este año, este parque temático incluirá una playa artificial, un balneario, un cine en 6D y réplicas de una iglesia veneciana y un castillo europeo. En el astillero fluvial de Wuchang, en la provincia de Wuhan, un millar de trabajadores ya tienen casi terminado el descomunal casco del nuevo «Titanic», tal y como muestran unas recientes fotos aéreas distribuidas por Getty.
Más de un siglo después de su naufragio, la majestuosa estampa el «Titanic» volverá a flotar sobre las dulces aguas de un río al sur de China.
Comentarios
Publicar un comentario