Con 1,70 metros de estatura, el actor escocés ha visto cómo determinados papeles se le negaban por ser 'demasiado bajo' para sus partenaires.
Eligiendo papeles con criterio (Expiación, La desaparición de Eleanor Rigby), volcándose en cada interpretación (Filth, el sucio) y participando en alguna que otra franquicia de éxito (Las crónicas de Narnia, X-Men, It), James McAvoy se ha convertido en una de las estrellas de Hollywood más fiables de la gran pantalla. 2019 ha sido un gran año para el actor escocés, que lo empezó con M. Night Shyamalan y Glass y lo acabó con Pennywise e It: Capítulo 2. No obstante, no siempre le ha ido tan bien.
James McAvoy ha reconocido que su estatura (aproximadamente 1,70m) le ha impedido interpretar ciertos papeles por ser considerado demasiado bajo para el rol en cuestión, o incluso para aparecer en pantalla junto a su posible partenaire femenina. “A veces me dicen que soy demasiado bajo para un papel”, reconoce el actor en una entrevista con The Telegraph.
El actor se mantiene discreto y no da nombres ni identifica a quienes se refiere en sus comentarios, pero a continuación da a entender que alguna de sus compañeras en la gran pantalla no estaba de acuerdo con que se les hubiera puesto juntos.
“Incluso, cuando ya me han dado el papel, me hacen sentir que, por supuesto, van a tener que ingeniárselas de algún modo porque nadie creería que [mi personaje] pudiera estar con una mujer como ella”, recuerda. “Vale, ahora tengo que fingir que me caes bien durante ocho semanas de trabajo. Va a ser realmente difícil, porque eres muy arrogante”.
“A veces te hacen sentir que no eres lo bastante guapo para un determinado papel”, concluye.
Fuente: Cinemanía
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