El intérprete de Cyborg, involucrado en el Snyder Cut, está en conflicto con el estudio por lo ocurrido en el rodaje del film que terminó Joss Whedon.
Han pasado cerca de dos meses desde la última novedad que tuvimos en referencia al conflicto entre Ray Fisher y Warner Bros. En este periodo de tiempo Jason Momoa no ha dudado en ponerse de parte de su compañero mientras este y otros actores acudían al set liderados por Zack Snyder para rodar la nueva Liga de la Justicia. Pero la falta de novedades no quería decir que asistiéramos a una suerte de relajación en la lucha de Fisher, como ha quedado claro en una reciente entrevista a Forbes.
Una entrevista que para más señas, y según destaca The Hollywood Reporter, ha sido editada en cuestión de horas para cambiar el titular y eliminar una frase muy concreta de Fisher. Sheraz Farooqi, responsable de la pieza, no ha revelado a qué se debe este cambio, pero la declaración eliminada habla por sí sola: “Lo que me enfureció y terminó de convencer para denunciar a Joss Whedon fue que me informaran de que este había ordenado que el aspecto de un actor de color fuera cambiado en la posproducción porque no le gustaba el color de su piel”.
Según reveló Fisher vía Twitter este verano, durante los célebres reshoots de Liga de la Justicia (aquéllos que acometió Joss Whedon una vez Zack Snyder tuvo que ausentarse por una tragedia familiar), el director de Los Vengadores mostró un comportamiento “repugnante y extremadamente poco profesional”, pero hasta ahora no había especificado en qué consistió este. La frase eliminada de la entrevista con Forbes podría dar la pista definitiva.
Frase que, a su vez, se apoya en unas declaraciones que sí se han mantenido en el texto: “Antes de que empezaran los reshoots se produjeron múltiples conversaciones racistas a manos de antiguos y actuales ejecutivos de Warner Bros. Pictures. Quienes tomaron parte en estas conversaciones fueron Geoff Johns, Jon Berg y el actual jefe de Warner Bros. Pictures Group Toby Emmerich”, contó Fisher.
Hasta ahora, Toby Emmerich había quedado al margen de los alegatos del actor contra la cúpula de Warner, pero ahora se une en la lista de supuestos culpables a Johns y Berg, quienes según Fisher fueron conscientes de la nociva actitud de Whedon en el set y no tomaron cartas en el asunto. Toda esta intriga ha conducido a una investigación para aclarar qué sucedió durante los reshoots de Liga de la Justicia, sin que aquí hayan terminado los problemas.
Pocos días después de que se anunciara el comienzo de la investigación, Warner reveló que Fisher había rehusado hablar con el investigador contratado, y el actor replicó a su vez que sí se había reunido, pero no había querido seguir con el proceso al descubrir que esta persona no había sido convocada por un tercero, como había solicitado para asegurar su profesionalidad. “Mi idea es decir cosas mucho más específicas una vez termine la investigación. Esta entrevista solo es la versión abreviada”, contaba Fisher a Forbes.
La respuesta de Warner
Puede que el comentario de Fisher sobre una solicitud para cambiar el aspecto de una persona de color en los reshoots haya sido eliminado de la entrevista de marras, pero los increpados han querido contestar al actor aún así, negándolo todo. “El señor Fisher no tiene ninguna fuente que respalde esas acusaciones contra Whedon y otros implicados en la película”, ha declarado un representante del director.
“Él mismo admitió su falta de pruebas en Forbes cuando dijo que ‘le habían informado’, sin identificar quién le informó de eso, o cuándo obtuvo esta información. En la realidad, nada de esto ocurrió”. Acto seguido, este mismo representante aclara las circunstancias en las que se gestó este montaje. “Como es habitual en todas las películas, hay mucha gente involucrada en el producto final, incluyendo montador, compositor, encargado de efectos especiales… “
“El proceso fue aún más complicado debido a que Zack rodó en película y Joss en digital, lo que requirió que el equipo, liderado por el mismo encargado de color que había trabajado en otras películas de Zack, tuviera que fusionar ambos formatos”. Este encargado es Stefan Sonnenfeld, que efectivamente se ha puesto a las órdenes de Snyder en films como 300, Sucker Punch o El hombre de acero.
En la misma entrevista, Fisher se muestra consciente de la confusión que rodea todo este asunto, y dice: “Has de preguntarte a ti mismo qué es más plausible: que yo torpedee mi carrera a propósito acusando a poderosas figuras de Hollywood de cosas que podrían ser fácilmente refutadas, o que varias personas en posiciones de poder digan y hagan cosas terribles para mantener ese poder”.
El actor actualmente está implicado en una nueva Liga de la Justicia: la que mostrará el Snyder Cut trayendo de vuelta a parte del reparto y a actores como Joe Manganiello o Jared Leto. El proyecto de Zack Snyder, planteado como una miniserie de cuatro episodios, se estrenará en HBO Max en 2021, y está por ver en qué ha derivado todo este asunto cuando llegue al streaming.
Fuente: Cinemanía
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