En la era de la robotización activa en todo el mundo, es mucho más lógico estudiar robótica que esculpir figuras de plastilina. En los próximos 10-15 años, la robótica se convertirá en una tecnología tan familiar como solía ser la electricidad. Cada año, los padres se enfrentan a la difícil pregunta de a qué taller inscribir a su hijo. Quieren que su hijo aproveche el tiempo libre y, al mismo tiempo, quieren asegurarse de que el taller sea útil y no una inversión de dinero sin sentido. Si el objetivo es proporcionarle a su hijo conocimientos reales que cumplan con las tendencias actuales, es recomendable considerar cerca de los talleres de robótica, diseño 3D, programación e inteligencia artificial. “Hace apenas tres décadas, la idea de robots solo se encontraba en libros de ciencia ficción, pero en la actualidad, el uso de robots ya no sorprende a nadie. Aquellos que saben cómo "lavar, aspirar pisos y cocinar" se han convertido en miembros de la familia, y en la industria, e...